En un acto de respeto, cariño y compañerismo, se instalaron altares en honor a los agentes de Policía Preventiva y Vial, así como al personal administrativo de ambas dependencias, quienes han partido antes de nosotros.
El Día de Muertos se convierte en una oportunidad para recordar y celebrar la vida de estos hombres y mujeres dedicados, algunos de ellos caídos en cumplimiento del deber y otros que, tras años de servicio, dejaron una profunda huella en nuestra comunidad. Ellos siguen presentes en la memoria y en el corazón de quienes compartieron su vida y su vocación.
Vialidad y Tránsito preparó un altar de tres niveles, el más tradicional, decorado con flores, luces, agua, y sal, así como los alimentos y bebidas que los compañeros solían disfrutar en vida, invitando simbólicamente a sus almas a este reencuentro. Este altar es un reflejo de la devoción y el respeto hacia quienes ofrecieron su servicio y su amistad.
Por su parte, en la comandancia de Policía Municipal colocó fotografías de aquellos que dieron su vida por la seguridad de los demás y de otros compañeros que, con compromiso y entrega, dedicaron su labor a proteger a la ciudadanía. La luz de velas y la calidez de los altares recuerdan su valor y su espíritu inquebrantable, un homenaje sincero a su vocación de servicio.
Con esta ofrenda, compañeros y seres queridos se unen para rendir homenaje a quienes, aunque ya no están físicamente entre nosotros, continúan vivos en nuestros recuerdos y en cada acción que realizamos para seguir su legado de justicia y protección.
